Por Isidro García
CENTROS DE CONCILIACIÓN
Este martes se formalizó la entrada en funciones de los Tribunales Laborales y los Centros de Conciliación Locales, derivados de la implementación de la Reforma al Sistema de Justicia Laboral en el Estado.
Además del arranque oficial, se entregaron nombramientos a jueces y directores de delegaciones.
La ceremonia que se realizó en el Palacio de Justicia culmina un proceso que inició en 2019 en un esfuerzo conjunto de los tres Poderes de Coahuila, destacó el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís.
De entrada, la reforma al sistema de justicia laboral es positiva pues se busca un beneficio tanto para los trabajadores como para las empresas.
El gobernador indicó que los centros de conciliación tendrán la responsabilidad de dialogar con los trabajadores y empleadores para encontrar entre todos una solución justa y benéfica para las partes en un plazo no mayor a los 45 días.
“Coahuila cumple así con el compromiso nacional, con la convicción de que será fundamental para responder a los requerimientos actuales, favorecer el equilibrio entre los factores de la producción y fortalecer el liderazgo que tenemos en el ámbito laboral”, aseguró.
Decía que la reforma es positiva porque a lo largo de los años se ha visto que alguna de las partes ha tratado de sacar ventajas de un juicio laboral lo mismo por parte obrera que por la parte patronal.
A lo largo de los años, observé casos en los que los trabajadores, asesorados por sus abogados, prolongaban los juicios tanto como les fuera posible para obtener grandes cantidades de dinero por concepto de salarios caídos.
A raíz de la reforma laboral, que creo fue algo positivo, el legislador fijó sólo un año de salarios caídos para evitar el alargamiento de los juicios que en ocasiones terminaban con la fuente laboral cuando se trataba de empresa micro, pequeñas o medianas.
En cambio, también había patrones que abusaban de los trabajadores aprovechándose de su ignorancia en las leyes, de la falta de dinero para contratar a un abogado pero sobre todo de su necesidad económica.
Por eso hay que darle la bienvenida a los centros de conciliación que ojalá cumplan con los objetivos que han dado su origen.
CORRUPCIÓN EN LAS JUNTAS
A pesar de las modificaciones y reformas a la Ley Federal del Trabajo, en diferentes Juntas de Conciliación Locales y Federales, prevalece la corrupción.
Los dueños del dinero contratan a abogados caros sin importar su capacidad, eficiencia y eficacia para ganar los asuntos laborales sino sus formas, sean cuales sean, de ganar los juicios.
Es así como abogados laboralistas, sobre todo los de grandes empresas o de grupos empresariales, siempre tratan de aprovecharse de la necesidad económica e inclusive de la ignorancia de los trabajadores para entregar liquidaciones o finiquitos por debajo de lo que establece la Ley.
Por un lado es común a estas alturas observar que en diversas Juntas de Conciliación Locales y Federales se realizan prácticas de corrupción a favor de las empresas y en contra de los trabajadores.
Una de las prácticas es la de diferir una y otra vez las audiencias para alargar los procesos y con ello cansar a los trabajadores para que en determinado momento del juicio acepten las cantidades de dinero –en su mayoría por debajo de lo que establece la Ley- que les ofrecen.
Lo anterior provoca que la gran mayoría de los trabajadores acepten indemnizaciones menores a los que marca la Ley.
Sin embargo, la corrupción en diferentes Juntas Locales y Federales no para ahí pues los empresarios ejercen su derecho de interponer amparos en contra de laudos en su contra con lo cual siguen ganando tiempo en perjuicio de los trabajadores.
Para colmo, ya perdidos, hay abogados que con base a “chicanadas” y con el contubernio de funcionarios de las Juntas difieren todo el tiempo posible para cumplir con el pago del laudo.
En fin.
Nos leemos mañana, Dios mediante.
reportelaguna2019@gmail.com