Por Isidro García
¿GARZA, LA IGLESIA EN MANOS DE LUTERO?
La frase “La iglesia en manos de Lutero”, se ha escuchado fuerte este miércoles luego de que Carlos Torres Rosas, secretario técnico del Gabinete de la Presidencia y coordinador general de Programas para el Bienestar, nombró a Claudia Garza del Toro como delegada de los Programas para el Bienestar en Coahuila.
Para empezar, Garza entra en lugar de Reyes Flores Hurtado quien se va al Senado de la República en sustitución de Armando Guadiana Tijerina, precandidato único de Morena al Gobierno del Estado de Coahuila.
Claudia se venía desempeñando como delegada de los Programas Integrales de Desarrollo del Gobierno de México en la Región Centro del Estado de Coahuila.
Pero porqué hay quienes preguntan si el haber nombrada a Garza en ese puesto equivale a poner la iglesia en manos de Lutero, es decir, que se podría trabajar en sentido opuesto al Gobierno de la República, a la 4T y a Morena.
Hay que decir que la flamante funcionaria fue dirigente estatal de Morena.
Sin embargo, me dicen que Claudia Garza del Toro es muy cercana al diputado federal Francisco Javier Borrego Adame, uno de los 22 miembros de Morena que fueron suspendidos por su apoyo al precandidato del Partido del Trabajo (PT) a la gubernatura de Coahuila, Ricardo Mejía Berdeja.
Borrego ha sido uno de los morenistas que anduvieron de acá para allá con Ricardo Mejía y quien le habría invertido dinero en su pre-precampaña.
Pero no sólo eso, también se dice que Garza del Toro es muy afín a Ricardo Mejía.
Habrá que ver si a Garza no le gana su cercanía con Borrego o su afinidad con Mejía.
¿Garza, la iglesia en manos de Lutero?
Conste, es pregunta.
NI SALAZAR NI JOSÉ ÁNGEL
Ahora que se ha dado el cambio en la Delegación de los Programas para el Bienestar en Coahuila, hay que recordar algo interesante.
Cuando se decía que Ricardo Mejía Berdeja sería el candidato de Morena porque así era la voluntad del Presidente Andrés Manuel López Obrador, trascendió que Mejía le habría ofrecido esa delegación a Shamir Fernández Hernández a cambio de que renunciara al PRI y se sumara a su proyecto a la gubernatura.
Sin embargo, como Mejía no quedó de candidato, Shamir se quedó sin esa Delegación al mismo tiempo que abandonó a Mejía para sumarse a Guadiana quizá esperando un “milagro” de que siguiera siendo considerado para ese cargo pero la cosa no fue así.
Con Shamir fuera de la jugada, había varios suspirantes para quedarse con esa Delegación y de ahí ayudar a Armando Guadiana en la elección.
En primer lugar se anotaba a Luis Fernando Salazar Fernández y luego a José Ángel Pérez Hernández, uno y otro que se habían alineado al proyecto de Guadiana.
El caso es que a Salazar lo nombraron coordinador de la precampaña y campaña de Guadiana.
En resumen, ningún torreonense (Shamir Fernández, Luis Fernando Salazar y José Ángel) quedó en la Delegación de los Programas para el Bienestar en Coahuila.
Hay que apuntar que en casos como este algunos de los que se mencionan podrían decir que nunca aspiraron a ese cargo.
Nos leemos mañana, Dios mediante.
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