Alrededor del 80% de la superficie se quedó sin regar
Gómez Palacio, Durango.- La situación en el campo lagunero es crítica, señaló el delegado en funciones de presidente del Comité Municipal de la CNC en Gómez Palacio, Pedro Luna Solís, al aseverar que la sequía y la indolencia de las autoridades de la Comisión Nacional del Agua para apoyar el sector campesino han dejado un grave daño al productor.
La falta de agua en las presas provocó que este año se registrara solo un mini ciclo agrícola, autorizando la CONAGUA, volumen de agua únicamente para 30 áreas compactas por productor, lo que provocó que muchos campesinos no sembraran, quedándose al menos el 80 por ciento de la superficie sin regar, detalló Luna Solís.
Dijo que actualmente los productores que están regando lo hacen bombeando el agua, cuando, aseguró, que el sistema de riego del distrito 017, “es muy moderno donde hay sistemas hidráulicos para bajar compuertas y subirlas según sea la necesidad de los volúmenes de agua”.
Sin embargo, recalcó que hoy por hoy Conagua, “hace oídos sordos, dejando a la deriva a los productores obligándolos a tener que bombear agua, aunado a que no hubo ningún apoyo de bombas, de diesel y eso es un gasto que es extra al costo del cultivo”.
Recordó que ante la poca superficie para regar muchos productores tuvieron que moverse de un ejido a otro para agregar 30 áreas y muchos ante la poca superficie decidieron mejor rentar sus derechos de agua.
“Entonces los campos de la región laguna, Coahuila y Durango, están desiertos sí y aquí en Gómez Palacio, el daño es grave, ojalá que los funcionarios de primer nivel de Conagua tengan sensibilidad social y humana y podamos esperar que haya un volumen considerable en la presa Lázaro Cárdenas para que haya modificaciones”.
Reitero Luna Solís, que entre el 60 y 80 por ciento de los productores se quedaron sin sembrar ni una planta de maíz, en comunidades como: San Sebastián, lo que origina que no haya pasto en las acequias para alimentar el ganado caprino. “o sea la situación es gravísima, este año para el campo es catastrófico sin ser fatalista sino realistas”.
Por lo anterior, urgió a los funcionarios del gobierno federal a se sensibles y ponerse la camiseta del sector social, luego de que las comunidades de Gómez Palacio, Lerdo, Mapimi y Tlahualilo, están padeciendo los estragos de la sequía y la falta de apoyos de la federación.
Al final refirió la pésima organización de la Comisión Nacional del Agua para otorgar los volúmenes de agua rodada al recordar que hubo años más críticos como en 1992, cuando apenas se sembraron 19 áreas contra las 30 de este año. “pero hubo una buena planeación, áreas compactas, regaron todos los árboles, todos los cultivos perennes como son Nogales y sorgo, “fue un éxito en ese año con menos volumen de agua”, puntualizó el líder municipal de los campesinos.