A siete años de su formación en la comunidad matamorense
Sergio Enrique Guajardo/Reporte Laguna
MATAMOROS, Coahuila.-
El socavón que hace siete años se formó en unos predios agrícolas, al norte del ejido Buen Abrigo de este municipio, aún sigue extendiéndose, sobre todo cuando se registran fuertes tormentas en esta área, que está rodeada de cerros.
Este fenómeno natural se registró un día del mes de junio del año 2015, precisamente en una extensión agrícola de la pequeña propiedad “Buen Abrigo”, que estaba sembrada de sorgo forrajero, por su dueño de apellido Galindo.
Fue el velador, de esa pequeña propiedad, Francisco, quien indicó que eran alrededor de la una de la madrugada de ese día, cuando estaba viendo su televisor y de repente escuchó un fuerte estruendo, que incluso provocó que temblaran las paredes y vidrios de las ventanas de la finca donde él pernocta, que le dio mucho miedo.
Al asomarse hacia el campo de cultivo al norte del rancho, alcanzó a observar que de una enorme abertura salía una gran nube de polvo.
A la mañana siguiente, ya con la claridad del día salió a ver que había sucedido observando que entre las plantas, en medio del cuadrante cultivado se había formado un enorme socavón -seco- de aproximadamente 50 metros de diámetro por unos 30 de profundidad y tendían a desbarrancarse sus paredes.
Le avisó a su patrón y éste a las autoridades locales de Protección Civil, cuyo personal se concretó a “acordonar” el área, para no permitir el acceso a ninguna persona que para ese entonces, un gran número de ellas intentaban acercarse lo más que pudieran para ver de cerca ese fenómeno natural.
Protección Civil Municipal, avisó al Gobierno del Estado quien envió representantes de PC en la materia, de igual manera, acudieron técnicos especialistas sobre ese tipo de situaciones de la Comisión Nacional del Agua, ya que a menos de un kilómetro, al poniente del socavón, lo mismo pasa un canal para riego agrícola, además de que en ese año, vertieron agua al lecho seco del río Nazas.
Al lugar del incidente también asistieron por varios días, técnicos especialistas en geo-física de la empresa Met-Mex Peñoles, quienes al terminar los estudios que realizaron en el lugar, emitieron su respectivo dictamen que aportaron a la Conagua, más nunca informaron sobre esos resultados a los medios de comunicación.
Actualmente el socavón se encuentra a más de 80 metros de diámetro, con unos 50 metros de profundidad, con algunas grietas y el nuevo dueño de esa pequeña propiedad, de apellido Tricio, no ha rellenado esa área y mucho menos sembrado, desconociéndose las causas, si las autoridades correspondientes le han emitido alguna recomendación al respecto.