Hamás, que controla la Franja de Gaza, confirmó que en las últimas horas lanzó 130 cohetes contra Tel Aviv
Reporte Laguna / El Demócrata
Tel Aviv, Israel.-
El grupo Hamas, que controla la Franja de Gaza, confirmó que en las últimas horas lanzó 130 cohetes contra Tel Aviv, luego de que el Ejército israelí bombardeó un edificio de 13 pisos en Gaza. Como resultado, al menos dos civiles israelíes más murieron, para un total de cuatro desde que iniciaron los ataques aéreos entre las dos partes el lunes. Del lado palestino, han fallecido al menos 28 personas, incluidos 9 niños y una mujer.
Las hostilidades entre Israel y el grupo islamista Hamas, que controla la Franja de Gaza, se intensificaron este martes, mientras cada lado contraataca con bombardeos que recuerdan su último gran conflicto en 2014. En total y hasta el momento los bombardeos de las dos partes dejan 28 palestinos y cuatro israelíes muertos.
En las últimas horas, Hamas confirmó que lanzó 130 cohetes contra Tel Aviv, después de que un ataque aéreo israelí destruyera una torre de oficinas Hanadi, en Gaza, de al menos 13 pisos.
Como resultado del ataque del movimiento armado palestino, murieron otros dos ciudadanos israelíes: una mujer de 50 años y posteriormente un hombre cuando el bus en el que se transportaba en la ciudad de Holon, cerca de Tel Aviv, fue alcanzado por un cohete. Otras seis personas resultaron heridas, según fuentes médicas. En las primeras horas del martes murieron otros dos civiles de este país por las acciones aéreas de Hamas.
El grupo armado palestino ya había amenazado con disparar hacia la urbe israelí si su Ejército cumplía la advertencia de atacar la conocida edificación, que contenía una oficina civil de Hamas, lo que en efecto ocurrió poco después.
«Estamos cumpliendo ahora nuestra promesa de lanzar un ataque masivo con cohetes contra Tel Aviv y sus suburbios, con 130 cohetes, en respuesta al ataque del enemigo contra torres residenciales», dijo el brazo armado de Hamas en un comunicado.
Sin embargo, y según testigos, se emitió una orden de evacuación para los residentes del bloque y sus alrededores una hora antes del ataque aéreo israelí. El Ejército israelí también afirma que les dio a los ocupantes una hora para desalojar las instalaciones antes de atacar. Por el momento, no hay reportes de posibles víctimas por este hecho en concreto.
Las autoridades israelíes señalan que han interceptado decenas de cohetes a través de sus sistemas de defensa antimisiles, de lo contrario, las cifras de víctimas serían mayores. Algunos de los proyectiles de Hamas cayeron en una escuela que quedó destruida, pero que se encontraba vacía para el momento del ataque.
Asimismo, la Autoridad de Aeropuertos de Israel informó que reanudó los vuelos después de detener brevemente todos los despegues el martes por la noche debido al lanzamiento de los cohetes desde Gaza.
Los ataques de Israel sobre Gaza dejan el mayor número de víctimas del lado palestino
Del lado palestino se encuentra la mayor cifra de fallecidos. En las primeras horas del martes, Israel lanzó nuevos ataques aéreos, dejando un total de al menos 28 palestinos muertos, desde que comenzó esta operación el lunes.
El Ejército de Israel indicó que el blanco de sus acciones son los grupos armados, lanzacohetes y puestos de Hamas en Gaza y añadió que la mayoría de los muertos en los territorios vecinos son militantes. Sin embargo, al otro lado de la frontera informan que son varios los civiles que perdieron la vida, incluidos 9 niños y una mujer.
Los bombardeos continuaron y los palestinos informaron de fuertes explosiones cerca de la ciudad de Gaza y al otro lado de la franja costera.
El nuevo enfrentamiento escaló a ataques aéreos el lunes cuando Hamas decidió lanzar cohetes a Jerusalén, en una aparente respuesta del movimiento a los más de 300 palestinos que han resultado heridos en los enfrentamientos con las fuerzas israelíes frente a la mezquita de Al-Aqsa, donde protestan contra un nuevo intento de desalojo de familias palestinas en Jerusalén Este, ciudad sagrada para los dos partes que la reclaman como propia.
Las autoridades israelíes confirmaron que iniciaron la operación después de que los militantes cruzaran lo que el primer ministro Benjamin Netanyahu llamó una «línea roja», por disparar el lunes contra el área de Jerusalén, por primera vez desde la guerra de 2014.
Se espera que las dos partes sigan lanzando bombardeos en represalia. Este 11 de mayo, Netanyahu aseguró que los militantes en la Franja de Gaza «pagarán un precio muy alto».
«Estamos en el apogeo de una campaña de gran peso (…) Hamas y la Yihad Islámica pagaron y pagarán un precio muy alto por su beligerancia (…) Su sangre está perdida», dijo el premier israelí en una declaración pública junto a su ministro de Defensa y jefe militar, Benny Gantz.
La comunidad internacional rechaza los bombardeos de las dos partes
El Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas anunció que sostendrá en privado una reunión este miércoles para abordar el brote de violencia más grave del conflicto israelí-palestino de los últimos años.
La ONU pidió a Israel que actúe con moderación en sus operaciones de seguridad y paralelamente condenó el lanzamiento de cohetes desde Gaza.
«Las fuerzas de seguridad israelíes deben ejercer la máxima moderación y calibrar su uso de la fuerza. El lanzamiento indiscriminado de cohetes y morteros hacia los centros de población israelí es inaceptable», dijo el portavoz de la ONU Stephane Dujarric.
Previamente, el Gobierno de Estados Unidos, cuyo presidente Joe Biden ha tratado de reequilibrar la política hacia Israel y los palestinos después de que su predecesor, Donald Trump se pusiera del lado de Netanyahu en todos los frentes, abogó por Israel al afirmar que ese país tiene el derecho legítimo de defenderse de los ataques con cohetes de Hamas.
Al tiempo intentó presionar a las autoridades israelíes por el trato que reciben los palestinos. «La seguridad de Israel, a su derecho legítimo a defenderse a sí mismo y a su pueblo es fundamental y nunca vacilará (…) Jerusalén, una ciudad de tanta importancia para las personas de fe en todo el mundo, debe ser un lugar de coexistencia», dijo la portavoz Jen Psaki.
Con respecto a los desalojos de familias palestinas y la demolición de sus casas, Psaki admitió que «van en contra de nuestros intereses comunes para lograr una solución al conflicto».
No obstante, la más reciente escalada de violencia no estaría próxima a terminar. Netanyahu, dijo que en respuesta a los ataques con cohetes aumentaría la fuerza y la frecuencia de los ataques en Gaza, un enclave de 2 millones de personas.
Israel indicó que envió 80 aviones para bombardear Gaza, además de cuerpos de infantería y vehículos blindados para reforzar los tanques ya reunidos en la frontera, evocando recuerdos de la última incursión terrestre israelí en Gaza para detener los ataques con cohetes, en 2014.
Ese año más de 2.100 habitantes de ese territorio palestino y 73 israelíes murieron en la guerra de siete semanas, según el Ministerio de Salud de Gaza.
Con información de Reuters y EFE.