IG LA COLUMNA + Préstamos de pesadilla + Cobranza delincuencial

Por: Isidro García

PRÉSTAMOS DE PESADILLA

Estafadores.

Ladrones.

Defraudadores.

Asaltantes violentos.

Delincuentes.

Pedófilos.

Es así como llaman algunas empresas financieras, sobre todo de aplicaciones, a hombres y mujeres que cayeron en sus garras por necesitar de un préstamo.

Pero no sólo eso.

En algunos casos hay graves amenazas.

“Si no pagas, las pandillas prostituirán a tus hijos”.

“Esto es lo que te va a pasar a ti o a tu familia si no pagas”, amenazan enviando el video de alguna persona que es decapitada.

Estos mensajes y estas amenazas les llegan a los clientes, a sus familiares y amigos, a sus contactos de su teléfono celular.

El préstamo solicitado a empresas financieras, insisto, sobre todo de aplicaciones, para resolver un asunto o una dificultad, se ha convertido en toda una pesadilla por los angustiados, preocupados y apanicados deudores.

He tenido conocimiento de este tipo de casos registrados en Coahuila que hacen ver como niñerías los anteriores métodos de cobro de los bancos o de las empresas financieras tradicionales.

El modo de operar de empresas financieras a través de aplicaciones es una barbaridad.

“Hola… el señor/señora…. no ha hecho gestión sobre el adeudo, es por eso le enviaremos mensajes, si sigue así, vamos a seguirle enviando mensajes hasta que haga efectivo el pago”.

Ese es un mensaje “light” de cobro de una empresa financiera de las llamadas tradicionales que llegó a mi celular.

“Si conoce a esta persona (incluyen foto y credencial de elector) TENGA CUIDADO. Se dedica al robo y fraude de plataformas de préstamos en línea y por App’s. Si lo ve cuide sus pertenencias, no sabemos en qué momento pueda empezar a robar a personas con lujo de violencia. Responde al nombre de…. Si lo reconoce denúnciela”.

Este es uno de los mensajes duros de cobro de una empresa financiera a través de aplicaciones.

Lo anterior es posible porque uno de los requisitos para la obtención del crédito es indispensable mandar la foto de la credencial actualizada del Instituto Nacional Electoral (INE).

“Nuestra pandilla te atrapará a ti y a tu familia para pagar el préstamo por prostitución (…) Este es el final…”.

Este es otro de los mensajes acompañado de dos videos, uno en el que se observa cómo decapitaban a un hombre y otro donde violan a una mujer.

En los tres casos que he citado, conozco a las personas aludidas que no son estafadores, ladrones, defraudadores, asaltantes violentos, delincuentes ni pedófilos y son deudores como miles que personas comunes que deben una casa, un vehículo automotriz o tienen algún crédito con alguna casa comercial, un banco o alguna entidad financiera.

Es así que con esta descomunal presión psicológica como las empresas financieras buscan que sus clientes paguen sus adeudos.

“Nos comunicamos de la aplicación () tratando de localizar a () (número de teléfono) quien adquirió un préstamo con nosotros desde hace 7 días y hoy es su fecha límite de pago, el cual en este momento ya se encuentra vencido y sin embargo se ha negado a pagar, requerimos de su apoyo para que le recuerde que el pago se debe ver reflejado, cualquier molestia que le cause este mensaje es justificable indicándole que él mismo fue quien proporcionó este número como referencia para contactarle”.

Los mensajes son enviados a los celulares de los deudores pero también a sus familiares y amigos a través de los servicios de mensajería tradicional o de WhatsApp.

Esto también es posible porque uno de los requisitos para la obtención del crédito es porque se autorizó acceder al teléfono celular del deudor, es decir, los hackean.

Por lo anterior es que las empresas financieras pueden enviar mensajes con difamaciones o calumnias a los familiares y amigos de los deudores que a estas alturas ya enfrentan, además de la deuda, ataques de pánico por los mensajes intimidatorios o hasta amenazantes.

El “modus operandi” de las empresas es desprestigiar y desacreditar a los deudores para obligarlos a pagar de una manera casi inmediata y sin hacer ningún tipo de reclamo e inclusive desalentar recurrir a las autoridades como la Condusef (Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros).

Las empresas aplican esa estrategia para que los familiares y amigos de los deudores llamen a éstos, les reclamen y los presionen para que paguen a la empresa que ahora los está molestando en sus teléfonos celulares.

En el peor de los casos, existe todavía el riesgo de que el hackeo de teléfonos celulares se extienda a los familiares y amigos.

El decirles a los receptores de los mensajes que reciben esas notificaciones porque el deudor proporcionó sus números como referencias para contactarlos, también es parte de la estrategia para presionar al deudor.

Esta situación de la que he tenido conocimiento por casos que he conocido directamente, se ha acrecentado porque algunas personas han recurrido a este tipo de créditos porque los bancos y otras financieras no les facilitaron el dinero ya sea por su negativo historial crediticio o porque no cuentan con medios para garantizar el préstamo.

COBRANZA DELINCUENCIAL

La cobranza de estas empresas financieras es absolutamente delincuencial ya que está muy lejos de la llamada cobranza extrajudicial que se no se hace en los tribunales competentes.

Los abusos, excesos y atropellos que cometían los bancos y las empresas financieras hasta hace unos años, se han quedado chiquitos ante las acciones rufianescas de algunas empresas financieras de ahora.

Hay que recordar que los legisladores hicieron adiciones y modificaciones precisamente para evitar los abusos, excesos y atropellos de las instituciones bancarias o empresas.

Lo que hacían los bancos y financieras o sus despachos de abogados era la de hablar por teléfono “a todas horas”, muy temprano o muy tarde y hasta en horas de la madrugada, pero también con un lenguaje agresivo lleno de insultos e improperios.

A raíz de las adiciones y modificaciones de los legisladores, en 2014 se publicaron las nuevas reglas para los despachos de cobranza y la Condusef posee ahora nuevas herramientas para vigilar las sanas prácticas en materia de cobranza, además de establecerse que las entidades financieras que incumplan con lo previsto en las disposiciones, podrán ser objeto de sanciones.

En el Diario Oficial de la Federación se publicaron las Disposiciones de Carácter General aplicables a las Entidades Financieras en materia de Despachos de Cobranza, por lo que las entidades financieras deberán sujetarse a las nuevas reglas respecto a las prácticas de cobranza realizadas por los despachos que gestionan su cartera de crédito.

El caso es que ahora las empresas financieras están incurriendo en prácticas de cobranza que más que malsanas y perniciosas son absolutamente delincuenciales.

Algunas empresas financieras, sobre todo las de aplicaciones, están aprovechando las lagunas legales porque no están reguladas las mensajerías instantáneas como la tradicional o la de WhatsApp y es aquí donde deben intervenir inmediatamente los legisladores.

La acción criminal y delincuencial de algunas empresas financieras es porque no tienen ningún respeto a la privacidad de los clientes y por ello impunemente difunden los datos de los clientes que proporcionaron su credencial del INE como uno de los requisitos para obtener el préstamo que necesitaban.

Y también cae en lo delincuencial el hackeo de los teléfonos celulares de los clientes para hacerles llegar los molestos e intimidantes mensajes a sus amigos y familiares para que los presionen y paguen sus adeudos.

Este, amigos lectores, es el calvario que han vivido y están viviendo personas que han necesitado un préstamo que tendrán pagar dos, tres o cuatro veces más pero además terminarán con un desgaste psicológico importante por el desprestigio del que fueron objeto.

Lo deseable, insisto, es que los legisladores adicionen o modifiquen leyes para que los ciudadanos no sean víctimas de la cobranza delincuencial y rufianesca.

Nos leemos mañana, Dios mediante.

reportelaguna2019@gmail.com

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