Domingo López Bustos/Reporte Laguna
VIESCA, Coahuila.-
Alrededor de mil habitantes de los ejidos: Nuevo Reynosa, Vista Hermosa, Tierra y Libertad, Niños Héroes, San Manuel, Ignacio Zaragoza y La Fe, se quejaron y exigen a las autoridades municipales, tomen cartas en esta problemática social para resolver cuanto antes, el agudo desabasto de agua potable que están sufriendo, porque no se puede vivir sin ese servicio básico.
Informó a este medio de comunicación, Ezequiel López Lazarín quien vive en el ejido Tierra y Libertad, que desde hace más de un mes, el gobernador del estado, Miguel Ángel Riquelme Solís, tuvo a bien aplicar el programa “Vamos a Michas”, donde cada instancia gubernamental tienen que aportar recursos financieros, en este caso el Estado y el Municipio, y los beneficiarios la mano de obra para lograr la construcción y puesta en marcha de un pozo de agua potable para lograr el deseado objetivo.
“Precisamente, desde que el gobierno estatal, contrató los servicios de una empresa para la detección, exploración y excavación donde se construirá el pozo o noria para agua potable que abastecería a las referidas comunidades, se dejaron abandonadas las obras y ya transcurrió más de un mes, ante la zozobra de los alrededor de mil habitantes de este sector de Viesca, que por cierto, ya invirtieron cada quien por su cuenta, instalado bombas succionadoras, pero con resultados negativos”, explicó López Lazarín.
“En verdad que la mayoría de las familias de estos ejidos ya se desesperó, no hayan como hacerle para obtener el vital líquido, porque los pudientes, compran diariamente hasta cuatro o cinco garrafones de 10 litros de agua purificada, para la elaboración de sus alimentos y para beberla”, expuso nuestro entrevistado.
“La mayoría, conseguimos tambos de 200 litros o de otra capacidad, para acudir a las pequeñas propiedades a solicitarles el preciado líquido, previo el pago de una módica cantidad; también, los que no tenemos vehículo les pedimos el apoyo a los que sí tienen, pero debemos cooperarnos para la gasolina”.
“Pero, se da el caso de que los encargados de las pequeñas ya no nos quieren aportar agua, porque, la requieren para sus trabajos en el campo agrícola, donde la mayoría siembra melón, sandía o forrajes”, finalizó.